DIME CON QUIÉN ANDAS...
Verónica Roth nos presenta la
saga Divergente. En este mundo distópico, la sociedad está dividida en cinco
facciones; sus habitantes tienen una virtud según la facción a la cual
pertenecen: los sinceros pertenecen a VERDAD, los altruistas a ABNEGACIÓN, los
valientes a OSADÍA, los pacíficos a CORDIALIDAD y los inteligentes a ERUDICIÓN.
Bastante determinista esta sociedad, como si una persona cordial no pudiera ser
altruista, sincera, inteligente y valiente a la vez. En el libro, los de Osadía
más que valientes son locos, suben a los trenes en movimiento y se tiran de los
trenes a toda marcha, saltando a los techos de los edificios, además se
entrenan para la guerra, como soldados, en el caso de una futura guerra (aunque
supuestamente en ese mundo no habrá más guerras debido al sistema de
facciones); los de Cordialidad más que amables y cordiales son “los de abajo”,
ya que son los únicos que trabajan la tierra para abastecer de alimentos a
todos los demás, y claro, como son pacíficos y amables no se quejan; los que sí
pueden decir todo lo que se les ocurra sin fijarse si es adecuado o no son los
de Verdad. Los de Abnegación dan su vida por los demás, principalmente llevando
alimentos a los ABANDONADOS, que son los que no están en ninguna facción y
viven en situación de calle. Y por último los eruditos, o la clase dirigente,
poseen información de todas las facciones, sus miembros son los gobernantes, y
claro, no son altruistas, ni cordiales, ni siembran ni cosechan la tierra.
Esta organización puede romperse
si aparecen DIVERGENTES, o sea los que tienen aptitud para más de una facción.
A los 16 años los adolescentes eligen si
seguirán en su facción de nacimiento o
se cambiarán. Beatrice Prior, la
protagonista, se entera que es Divergente y que por esta razón su vida corre
peligro ya que a los eruditos no les conviene que haya gente que no encaja en
el orden establecido. Beatrice elegirá Osadía, su hermano Erudición, la madre
acepta la decisión, el padre se enoja. La protagonista descubrirá que el
sistema de facciones se está desmoronando porque se puede tener más de una
virtud a la vez.
El argumento del libro es
interesante pero la trama es aburrida, llena de descripciones, algunas
complicadas y otras superficiales, pero innecesarias al fin.
Y como toda saga, que más que
literaria es comercial, tiene un final que no dice nada, pero en la solapa del
libro aparecen las portadas de “Insurgente”
y “Leal”, además de un cartel que
dice “¡CUIDADO! LECTURA ADICTIVA”.
Es una lectura recomendable para
adolescentes y jóvenes, los padres nos conformamos, “con tal que lean…”. Como
adultos cabe preguntarnos y preguntarles a los jóvenes: si nuestro mundo fuera
como el de la saga: ¿qué facción elegirías?, ¿a qué cosas estarías dispuesto a
renunciar para pertenecer a Abnegación?, ¿serías capaz de decir todo lo que pensás
para pertenecer a Verdad?, ¿te gustaría andar todo el tiempo de buen humor y no
poder expresar tu opinión cuando algo no te gusta como en Cordialidad?, ¿existe
la Democracia en ese mundo?, ¿y la libertad de expresión?, ¿y si sos una
persona alegre y cordial, pero te gusta estudiar y aprender, elegirías
Cordialidad o Erudición?
Por pura curiosidad leí la
segunda parte: Insurgente, terminé agotada y aburrida, desistí de leer Leal y Cuatro.
Pues bien, he tratado de ser
veraz diciendo mi opinión sobre esta saga, pero cordial; y no dejo de ser
erudita, al leerlo lo analizo y lo critico. Parece que soy Divergente…trataré
de ocultarlo, no soy lo suficientemente valiente ni abnegada para arriesgar mi
vida. Por suerte, estoy al otro lado de la valla…
Comentarios
Publicar un comentario